LA ESTRUCTURA DE LA IGLESIA - PARTE 3



Introducción

En toda construcción, no solo importa lo que se edifica, sino cómo se realiza. Dios ya ha establecido el fundamento: Cristo, y ha revelado el plano para edificar Su cuerpo a través de los cinco ministerios. Ahora, cada creyente tiene un papel activo en esta construcción. No estamos llamados a ser una iglesia de nombre, sino una iglesia de acción, esencia y edificación viva. Un día, la obra de cada uno será puesta a prueba por fuego.

Historia o Moraleja de la Vida Diaria

Un día, tres obreros estaban construyendo una casa. El primero utilizaba madera barata y clavos viejos, pensando: "Nadie lo notará, todo se ve bien por fuera." El segundo era cuidadoso, pero actuaba sin convicción: "Haré lo justo para que no me digan nada." En cambio, el tercero, aunque no había nadie que lo vigilara, trabajaba con excelencia: "Estoy construyendo como si fuera para mí." Años después, el dueño de la obra les entregó una llave y dijo: "Esta casa que construiste... es para ti." Así será también con nosotros. Lo que edifiquemos hoy, lo heredaremos mañana. No se trata de cuántas actividades realizamos, sino de con qué corazón y convicción las llevamos a cabo.

Desarrollo del Tema

A. Cada Uno Debe Mirar Cómo Sobreedifica

- 1 Corintios 3:10-13: "Yo, como perito arquitecto, puse el fundamento... pero cada uno mire cómo sobreedifica. La obra de cada uno será manifiesta; el fuego la probará."

B. Materiales de Edificación

  • Oro, plata, piedras preciosas: representan una obra espiritual, profunda y eterna.
  • Madera, heno, hojarasca: representan obras superficiales, humanas y pasajeras.

C. Ser Iglesia por Acción, No por Religión

- Mateo 7:24-27: "El hombre prudente edificó sobre la roca."

- Santiago 1:22: "Sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores."

D. Responsabilidad Individual y Juicio de la Obra

- Romanos 14:12: "Cada uno dará cuenta a Dios de sí mismo."

- 2 Corintios 5:10: "Para que cada uno reciba según lo que haya hecho mientras estaba en el cuerpo."

Conclusión

Cristo es el fundamento, los cinco ministerios edificarán, y tú estás llamado a construir con excelencia. No vivas solo como un asistente más; sé un edificador. No realices obras religiosas, sino espirituales. Recuerda: lo que hoy edificas será probado, y lo que permanezca, será tu recompensa.

Aplicación a la Vida Diaria

Haz un inventario personal esta semana:

  • ¿Qué estoy construyendo con mi vida?
  • ¿Estoy edificando con oro (intimidad, obediencia, verdad) o con heno (rutina, apariencia, religión)?
  • ¿Mis acciones reflejan que soy iglesia por esencia o solo por palabra?

Pídele al Espíritu Santo que te enseñe a edificar con sabiduría. No construyas algo que el fuego consumirá. Construye algo eterno.